BUSCA ACA:

martes, 30 de junio de 2015

DENGUE

DENGUE 
El dengue es una enfermedad causada por arbovirus, del cual existen cuatro serotipos relacionados. En la actualidad es la enfermedad viral más importante, transmitida por vectores, afecta al ser humano y está emergiendo como una amenaza a nivel mundial.



Hay cuatro virus del dengue (del uno al cuatro) cuyo vector principal es Aedes aegypti y todos ellos producen un síndrome parecido.

Después de una incubación de dos a siete días, la persona suele experimentar fiebre de comienzo súbito, cefalea, dolor retroorbitario y dolores de espalda, además de mialgias intensas que explican la denominación popular de “fiebre quebrantahuesos”. El primer día suele haber un exantema macular, así como adenopatías, vesículas en el paladar e hiperemia conjuntival. La enfermedad puede durar una semana y suele acompañarse de otros síntomas, como anorexia, náusea o vómito, intensa hipersensibilidad cutánea y, en los días en los que cede la fiebre, un exantema maculopapuloso que comienza en el tronco y se extiende a las extremidades y a la cara. En el dengue no complicado a menudo se ven epistaxis y petequias dispersas y durante la fase aguda de la enfermedad, las lesiones gastrointestinales previas pueden sangrar.



Curso de la enfermedad.

1.    Fase Febril:

Los pacientes generalmente desarrollan fiebre usualmente alta y repentina, que puede ser bimodal, por lo general dura de dos a siete días y suele acompañarse de enrojecimiento facial, eritema, dolor generalizado del cuerpo, mialgia, artralgia, cefalea y dolor retroocular. La anorexia, náuseas y vómitos son comunes, puede ser difícil distinguir clínicamente de otras enfermedades febriles agudas. La prueba de torniquete positiva en esta fase, aumenta la probabilidad de dengue. Además estas características clínicas son indistinguibles entre los casos de dengue y dengue grave. Por lo tanto la vigilancia de signos de alarma y otros parámetros del estado hemodinámico del paciente, es fundamental para reconocer la progresión a la fase crítica, por parte del personal. En esta fase pueden presentarse manifestaciones hemorrágicas menores como petequias y equimosis; el hígado puede estar aumentado de tamaño y ser doloroso a la palpación. La primera alteración en el hemograma, es una disminución progresiva en el recuento total de leucocitos; en los hallazgos clínicos la bradicardia relativa es común en esta fase.



2.    Fase Crítica:

Ocasionalmente sucede en torno a la desaparición de la fiebre, entre los tres o siete días de la enfermedad, cuando la temperatura desciende a 38 o 37.5° centígrados o menos y se mantiene por debajo de este valor; puede ocurrir un aumento de la permeabilidad capilar, manifestado por un aumento de los niveles de hematocrito, lo que indica el comienzo de la fase crítica. Puede asociarse con epistaxis, gingivorragias, metrorragia o hipermenorrea en mujeres en edad fértil. La leucopenia con neutropenia y linfocitosis, es seguida de una rápida disminución del recuento de plaquetas, acontecimientos que suelen preceder la extravasación de plasma, la cual es variable. El derrame pleural y la ascitis pueden ser clínicamente detectables en función del grado de pérdida de plasma y el volumen de líquidos administrados, por lo que el personal debe indicar radiografía de tórax o ecocardiografía toracoabdominal, ante esta sospecha.



El choque ocurre cuando se pierde un volumen crítico de plasma por extravasación. Cuando se produce el choque, la temperatura corporal puede estar por debajo de lo normal.



3.    Fase de Recuperación:

Cuando el paciente sobrevive a la fase crítica, la cual no excede de cuarenta y ocho a setenta y dos horas, evoluciona a la fase de recuperación. Hay mejoría del estado general, de los síntomas gastrointestinales, del apetito, estabilización del estado hemodinámico y se incrementa la diuresis.

Evolucion del Dengue.

lunes, 29 de junio de 2015

FIEBRE CHICUNGUNYA

  FIEBRE CHICUNGUNYA

La palabra “chikungunya” significa “el que se dobla” y proviene de una lengua de África donde se encontró la enfermedad por primera vez en humanos.

Es una enfermedad emergente transmitida por mosquitos y causada por un alfavirus, el virus chikungunya, el cual es transmitido principalmente por los mosquitos Aedes aegypti y Aedes albopictus, las mismas especies involucradas en la transmisión del Dengue.




Los mosquitos adquieren el virus a partir de un huésped virémico. Después de un periodo promedio de incubación extrínseca de diez días, el mosquito es capaz de transmitir el virus a un huésped susceptible, como a un ser humano. En los humanos picados por un mosquito infectado, los síntomas de enfermedad aparecen generalmente después de un período de incubación intrínseca de tres a siete días (rango: uno a doce días).



Fase Aguda.

La enfermedad aguda generalmente se caracteriza por inicio súbito de fiebre intensa (típicamente superior a 39°C) y dolor articular intenso. Otros signos y síntomas pueden incluir cefalea, dolor de espalda difuso, mialgias, náuseas, vómitos, artritis de varias articulaciones, exantema muy pruriginoso (imagen) y conjuntivitis. La fase aguda dura entre tres y diez días.



La fiebre generalmente dura entre uno y siete días. Puede ser continua o intermitente, pero la disminución de la temperatura no se asocia a mayor gravedad de los pacientes. Ocasionalmente la fiebre puede acompañarse de bradicardia relativa. Los síntomas articulares generalmente son simétricos y ocurren con más frecuencia en manos y pies, pero también pueden afectar articulaciones más proximales. También se puede observar tumefacción, asociada con frecuencia a tenosinovitis. A menudo los pacientes están gravemente incapacitados por el dolor, la sensibilidad, la inflamación y la rigidez. Muchos pacientes no pueden realizar sus actividades habituales ni presentarse a trabajar y con frecuencia están confinados en cama debido a estos síntomas. El exantema aparece generalmente entre dos a cinco días después del inicio de la fiebre en aproximadamente la mitad de los pacientes y este se acompaña de prurito intenso. El exantema es típicamente maculopapular e incluye tronco y extremidades, aunque también puede afectar palmas, plantas y rostro. El exantema también puede presentarse como un eritema difuso que palidece con la presión.

No se observan hallazgos hematológicos patognomónicos significativos en las infecciones por el virus Chikungunya. Los hallazgos de laboratorio anormales pueden incluir ligera trombocitopenia (de 100,000 mm3 a <150,000 mm3), algunas veces hay leucopenia y las pruebas de función hepática están elevadas. La velocidad de sedimentación globular y la proteína C reactiva están generalmente elevadas.



Fase Sub Aguda (once a noventa días).

Después de los primeros diez días, la mayoría de los pacientes sentirán una mejoría en su estado general de salud y del dolor articular. Sin embargo, posteriormente puede ocurrir una reaparición de los síntomas y algunos pacientes pueden presentar síntomas reumáticos como artritis de varias articulaciones, principalmente de manos y pies, exacerbación del dolor en articulaciones y huesos previamente lesionados y tenosinovitis hipertrófica subaguda en muñecas y tobillos. Estos síntomas son más comunes dos o tres meses después del inicio de la enfermedad. Algunos pacientes también pueden desarrollar trastornos vasculares periféricos transitorios, tales como el síndrome de Raynaud. Además de los síntomas físicos, la mayoría de los pacientes sufrirá síntomas depresivos, fatiga general y debilidad.



Fase Crónica.

Se caracteriza por la persistencia de síntomas por más de tres meses. La frecuencia con que los pacientes presentan síntomas persistentes varía sustancialmente según el estudio y el tiempo transcurrido entre el inicio de los síntomas y el seguimiento.

El síntoma persistente más frecuente es la artralgia inflamatoria en las mismas articulaciones que se vieron afectadas durante la etapa aguda. Generalmente no hay cambios significativos en las pruebas de laboratorio, ni en las radiografías de las áreas afectadas. Sin embargo, algunos pacientes desarrollan artropatía/artritis destructiva, semejante a la artritis reumatoidea o psoriásica.


Otros síntomas o molestias durante la fase crónica pueden incluir fatiga y depresión. Los factores de riesgo para la persistencia de los síntomas son la edad avanzada (mayores de sesenta y cinco años), los trastornos articulares preexistentes y la enfermedad aguda más grave.

jueves, 25 de junio de 2015

Este espacio esta diseñado para brindar informacion a cerca de Enfermedades, Consejos para mejorar nuestra Salud y Nutrición. Tambien puedes encontrar tips para Estudiantes en Areas de la Salud y Medicina.

 Se ha creado con el Objetivo de Informar y Educar al lector, y facilitar la comprensión de terminos medicos, Enfermedades y borrar aquellas creencias erroneas sobre las Enfermedades y Medicina.